14 DE FEBRERO
1858 - 1923
Villa
Constitución y la curiosa historia de los nombres de sus calles
Por Ariel F. Gómez, periodista
Como en toda
su historia, en nuestra ciudad hasta los hechos más simples, como bautizar una
arteria, tuvo sus vaivenes, polémicas, reveses y cuestiones que rozaron lo
ridículo. Lo más insólito es que numerosos vecinos cambiaron varias veces de
domicilio sin moverse de su casa.
Recuerdo que
cuando chico (tengo 57 años) mi abuela se empeñaba en seguir llamando Tucumán a
la ya por entonces Av. Ingeniero Acevedo, creo que también le decía Buenos
Aires a Lisandro de la Torre y Santa Fe a Hipólito Yrigoyen. Por entonces vivíamos
en Mendoza y General López, en el centro villense y esas calles estaban cerca
de casa.
Con estos
recuerdos en mano, me propuse para este aniversario de Villa Constitución,
ahondar en la historia de la nomenclatura de las calles villenses y, en algunos
casos, los de sus curiosos cambios de nombres. Por supuesto, voy a recurrir como
es habitual a la ayuda siempre necesaria de nuestro historiador local Santiago
Lischetti.
La nomenclatura
de las calles se inició en 1897. El 25 de agosto de aquel año la Comisión de
Fomento bautizó con el nombre del prócer máximo Don José de San Martin a
nuestra calle central, desde San Luis a 14 de Febrero (el ejido urbano de Villa
Constitución no se extendía mucho más allá).
El 4 de octubre
de 1901 la Comuna resuelve “dar nombre a las calles del pueblo dentro de los límites
del plano de su fundación”. Se comenzó con las perpendiculares al río, de norte
a sur las que quedaron nominadas como Rioja (hoy 14 de Febrero), Jujuy, Salta,
Corrientes (Eva Perón), Buenos Aires (Lisandro de la Torre), Santa Fe (Hipólito
Yrigoyen), Entre Ríos, Córdoba, Tucumán (Ing. Acevedo), Mendoza, San Juan,
Santiago del Estero, Catamarca y San Luis. En aquel inicio del siglo XX calle
San Luis, según expresa la resolución comunal era “la que limita con las
antiguas chacras”. Es decir que era la finalización del poblado (Cilsa se
instalaría en 1947).
Las paralelas al
río fueron nombradas como Colón, General López, Sarmiento, Rivadavia, Boulevard
General San Martín, General Belgrano, Moreno, Coronel Dorrego, General Urquiza,
General Bolívar, Independencia, General Saavedra y Almirante Brown. Salvo
Saavedra (hoy Presbítero Daniel Segundo), todas mantienen en la actualidad su
denominación original.
Mudarse sin
irse de casa
No obstante Villa
Constitución, vivió -y padeció- una constante modificación de nombres de calles
con los consiguientes trastornos para vecinos y comerciantes que se vieron
obligados a tramitar cambios de domicilio en sus documentos sin haberse movido
de sus casas o locales. Inconvenientes y gastos que se duplicaron o multiplicaron
cuando estas alteraciones de nomenclaturas ocurrieron más de una vez en cortos
períodos de tiempo.
Veamos a un
ejemplo:
“20 de mayo de
1933: Con motivo de celebrarse el 14 de Febrero de este año el 75 aniversario
de la fundación del pueblo, la Comisión de Festejos solicita a la Comuna dar
esa fecha como nombre a una calle de la población, y la misma resuelve
entonces, “dar el nombre de 14 DE FEBRERO a la calle Rioja a partir del
Boulevard San Martin hacia Saavedra, desde la fecha y hacer las comunicaciones
del caso para su oficialización”. En 1946 este tramo se denominó PRESIDENTE
PERON, volviendo a ser, en 1955, 14 de Febrero. Por lo tanto, fue: RIOJA desde
1901, 14 DE FEBRERO desde 1933, PRESIDENTE PERON desde 1946 y, nuevamente 14 DE
FEBRERO desde 1955 a la fecha. Este último nombre fue trasladado en 1946 a la
calle Tucumán, perdiendo esta su denominación que databa de 1901”. (Historia de
Villa Constitución 1857-1978, de Santiago Lischetti).
Poco cuesta
imaginar la sorpresa y la indignación de vecinos que tuvieron que realizar tres
o cuatro cambios de domicilio en sus documentos o de los comerciantes que
debieron modificar el mismo número de veces todos sus datos comerciales sin
mudarse y por decisión de los funcionarios de turno.
Cabe acotar con
respecto a 14 de Febrero en 1965 se decidió que este nombre abarcara toda la
arteria, a partir de Colón, para evitar confusiones, así que las tres cuadras
que habían quedado como Rioja también cambiaron su nomenclatura.
Cambios y más
cambios
Los cambios
siguientes, entre tantos otros, fueron, por ejemplo, los de calles San Luis. El
27 de noviembre de 1957 se decretó que pasara a llamarse Avenida Centenario
como consecuencia de un pedido de la Comisión Ejecutiva de los Festejos del
Centenario de Villa Constitución. Pero no fue toda la extensión de la arteria
sino a partir de su intersección con Av. San Martín “hasta el límite de la zona
urbanizada”, señalaba el decreto, luego se transformaba en Ruta Nacional 177,
popularmente denominada “camino a Chapuy” puesto que llegaba hasta ese pueblo
del departamento General López.
Pero Av.
Centenario también cambió de nombre y ahora es Presidente Perón. Este fue una
de las tres substituciones producidas luego de la recuperación democrática a
raíz de proyectos presentados en el Concejo Municipal durante la década del 90.
Los otros dos fueron el de Eva Perón a calle Corrientes y Presbítero Daniel
Segundo a Saavedra.
Al respecto, bien
señala Lischetti que “si bien se han producido substituciones, al fin y al
cabo, las mismas no se han hecho sobre NOMBRES PROPIOS sino sobre REFERENCIAS
HISTÓRICAS que no es lo mismo. Cuando en Villa se impuso por vez primera a una
calle el nombre del General Perón se lo hizo con la calle “14 de Febrero"
que es un señalamiento histórico y, al volver a bautizarse con el nombre del
creador del Justicialismo una calle villense, se lo ha hecho con la avenida
“Centenario" que es otra referencia histórica”.
Por ello, cuando
se fundamentó el cambio de Corrientes por Eva Perón se expresó que dada la
importancia de su figura se debía elegir una de las arterias más extensas de la
ciudad y Corrientes es una de ellas ya que llega hasta el límite con Empalme.
El caso Daniel
Segundo
El criterio
cambió en 1998 con el homenaje al padre Daniel Segundo fallecido el año
anterior. Aquí se cambió un nombre propio, el de Cornelio Saavedra, al elegirse
la arteria donde se encuentra la Parroquia “Nuestra Señora de Luján” de la cual
era cura párroco y considerarse que su extensión era acorde a su figura. Su
fuerte impronta popular y su importante obra comunitaria bien valían el
homenaje, pero se podría haber elegido calle 25 de Mayo, situada en la misma
zona pero de tan solo 4 cuadras de extensión, lo que había significado un menor
impacto en los vecinos y comerciantes. Dicho sea de paso, el grueso de los
villenses continúa hoy, 25 años después, llamando Saavedra a esa avenida.
POR DECRETO Nº 16 BIS DEL 2 DE JULIO DE 1958, SE IMPUSO EL NOMBRE DE HIPÓLITO YRIGOYEN A LA CALLE SANTA FE.
Cambios
aceptados
Pero volvamos en
el tiempo a otros cambios menos cuestionados y asimilados por toda la
comunidad, tanto es así que pocos recuerdan que Lisandro de la Torre era Buenos
Aires; Hipólito Yrigoyen era Santa Fe e Ing. Acevedo, Tucumán.
Sobre ese tema
Lischetti recuerda que “a propuesta del Dpto. Ejecutivo Municipal el Concejo
Deliberante, por Decreto Nº 16 bis del 2 de julio de 1958, impone el nombre de Hipólito
Yrigoyen a la calle Santa Fe en ocasión de cumplirse al día siguiente el 25º
aniversario de la muerte del político y estadista que fuera por dos veces Presidente
de los argentinos”.
En tanto “el 26
de diciembre de 1958, a propuesta del Sr. Carlos Simonet, representante de la
Democracia Progresista en el Concejo Deliberante, este sanciona el Decreto Nº
67 que promulga el Dpto. Ejecutivo, imponiendo el nombre de Lisandro de la
Torre a la calle Buenos Aires en homenaje y memoria del gran tribuno que fuera
llamado ‘El Fiscal de la Patria’”.
Más tarde, 11
años después, el 4 de diciembre de 1969 la “Comisión Pro Homenaje al Ingeniero
Arturo Acevedo, concreta el mismo rebautizando a la calle Tucumán con el nombre
del destacado industrial, fundador de Acindar, expresando la invitación al acto
que, “de esta manera, la Ciudad de Villa Constitución desea expresar su
reconocimiento al pionero de la industria Siderúrgica Ing. Arturo Acevedo,
quien con su fe en nuestra comunidad tanto aportó al desarrollo y expansión de
nuestra Ciudad”.
Otro dato
curioso: los primeros nombres
substituidos fueron luego, en la década del 70, impuestos a las calles de
barrio 25 de Mayo, así que allí están Rioja, Buenos Aires, Santa Fe y Tucumán.
EL 26 DE DICIEMBRE DE 1958 SE IMPUSO EL NOMBRE DE LISANDRO DE LA TORRE A LA CALLE BUENOS AIRES.
Nombres
cuestionados
Ahora veamos el
caso particular de las calles de barrio San Lorenzo, el cual acaba de cumplir
72 años. Cabe señalar que algunas de estas arterias también atraviesan barrios
aledaños. Su característica principal es que refieren a personas relacionadas
con la historia de Villa Constitución, pero al parecer no fueron del todo bien
elegidas o fundamentadas, lo que provocó la indignación de Lischetti.
Pero primero
veamos quienes son los patronos de las calles sanlorencinas impuestos en
octubre de 1973: Aurelio Tabares (Primer Director de la primera escuela
primaria de nuestra ciudad); Doroteo Izarra (Primer médico que registran los
anales de Villa Constitución); María Perrissol (Fundadora y primera presidente
de la Biblioteca Popular); Manuel García (Presidente de la primera Comisión de
Fomento elegida por el sufragio popular); Solano Santos Rubio (Primer sacerdote
de nuestra Iglesia Parroquial); Cantalicio Roldán (Primer campanero que
registran los archivos de la Iglesia); Nicasio Oroño, Cayetano Carbonell y José
María Echagüe (los tres del núcleo fundador del pueblo).
Pasemos ahora a
la crítica de Lischetti:
“He señalado en
repetidas ocasiones la necesidad de substituir en tres calles del B° San
Lorenzo, los nombres asignados a las mismas el 23 de octubre de 1973”,
expresaba el historiador en su folleto “Cofre de Recuerdos”, editado en 1998.
El primer cambio
que pide es el de Aurelio Tabares (Primer Director de la primera escuela
primaria de nuestra ciudad) “Dato falso, pues lo fue Valentín De Toba, al que
sucedió 4 años más tarde don Aurelio Tabares, dejado cesante luego por mal
desempeño de su cargo, Tabares es nombrado en julio de 1862 y la escuela se
abre en julio de 1858 a cargo de don Valentín de Toba cuyo nombre es el que
debe llevar esa arteria barrial”, explica Lischetti.
Luego plantea un
caso similar con Doroteo Izarra (Primer médico que registran los anales de
Villa Constitución) “Dato inconsistente pues digo, precisamente, en mi libro
sobre Historia de Villa -donde fue extraído el dato por el Concejo- que, MUY
PROBABLEMENTE fue el primer médico, de lo que no hay constancia desde el
momento que en el primer libro de Actas de nuestro Juzgado de Paz se inicia en
1864 cuando ya dicho Juzgado llevaba seis años de instalado (5 de enero de
1859), en un acta para más del 19 de febrero de 1869, encuentro que el Dr.
Izarra es mencionado repetidas veces. Por lo tanto, en once años que van desde
la fundación de Villa en 1858 a 1869 puede haber ejercido otro médlco anterior
al Dr. Izarra. Lo “probablemente" es una cosa, es incertidumbre, y la
referencia “concreta" es otra cosa opuesta a lo anterior”, resume.
El otro nombre
cuestionado es el de Cantalicio Roldán (Primer campanero que registran los
archivos de la Iglesia) “Dato absolutamente falso en lo de ‘primer campanero’
por cuanto digo también en mi libro de historia -de donde tomó el Concejo la
referencia-: ‘En el año 1866 es nombrado sacristán y campanero, cargo que
desempeña alternadamente durante 43 años’. Nuestro Templo Parroquial fue
habilitado el 25 de agosto de 1858 y Roldán aparece 8 años más tarde en
registro local. Había nacido en 1853 y falleció en 1918 a los 65 años de edad.
Tenía por lo tanto 5 años de edad cuando se habilitó nuestro Templo y empezaron
a sonar las campanas del mismo”.
Finalmente
Lischetti plantea que “si la escuela del lugar o un vecino o quien fuere,
solicita querer conocer la biografía y méritos de los mencionados patronos de
esas calles, como es lo lógico y justo, no hay nada que ofrecer, no sólo porque
no entiendo que importancia encierra el haber sido EL PRIMERO en una actividad
cualquiera -siempre en referencia a tomar esa condición en cuenta para el
bautizo de una calle- sino, incluso, porque en la mayoría de esos casos, no hay
“curriculum” que considerar”.
LA PLAZA EVA PERÓN OSTENTA EL LLAMATIVO RECORD DE HABER CAMBIADO DE NOMBRE MEDIA DOCENA DE VECES.
Una plaza
récord
Para cerrar,
vamos a ver que no solo hubo idas y vueltas en los cambios de nomenclatura de
calles. También ocurrió en las plazas. El casos paradigmático y récord es el de
la hoy plaza “Eva Perón” de barrio Hoppe, (Avellaneda entre Independencia y
Presbítero Daniel Segundo) la cual tuvo ¡seis! modificaciones de nombre a lo
largo de su historia.
“El primero y
valedero, desde su inauguración en 1939 es el de ‘Gobernador Simón de Iriondo’,
ilustre santafesino de amplios merecimientos por los cuales nada menos que un
Departamento de nuestra provincia lleva su nombre; bautizo además en el que
estuvieron sus descendientes, entre ellos el propio Gobernador de la provincia
Dr. Manuel María de Iriondo”, enfatiza Lischetti.
“En 1952 se
reemplaza tal nombre por el de ‘Eva Perón’ -continúa el historiador-. En 1956
el de esta por el de ‘Mariano Moreno’, desconociendo la Intervención en el
municipio el primigenio nombre. En 1973 nuevamente ‘Eva Perón’. En 1977 otra
vez ‘Dr. Simón de Iriondo’ y actualmente, POR TERCERA VEZ ‘Eva Perón’. Es
innecesario extenderse en mayor comentario frente a este juego impropio a cargo
de las interpretaciones y pasiones políticas de los gobiernos de turno. De
haberse res petado desde el principio el nombre primigenio, nada de este
despropósito se hubiera consumado, Y hablo en tiempo pasado, no en tiempo
futuro”.
LA AV. ING. ACEVEDO FUE EN UN INICIO TUCUMÁN, LUEGO 14 DE FEBRERO, DESPUÉS DE NUEVO TUCUMÁN Y FINALMENTE SE LE IMPUSO EL NOMBRE ACTUAL.
¿Epílogo?
Hasta aquí este
resumen sobre algunas de las tantas historias sobre la curiosa manera que
tenemos en Villa Constitución de complicar hasta lo más sencillo. Quedan
numerosas curiosidades sobre los nombres de las arterias que cruzan toda la
ciudad, algunos son acertados otros presentan también sus extrañas
particularidades. Quedarán para futuras publicaciones si es que no nos perdemos
en el laberinto de confusiones que es nuestra historia local.
No hay comentarios:
Publicar un comentario